Los procedimientos y formas
de actuación mafiosas de las dictaduras del terrorismo económico silencioso y de los servicios secretos de
todos los países están conduciendo a la sociedad civil cada vez más empobrecida
al redil de los nuevos campos de exterminio: las Villas
Miseria.
Este es un fragmento del
libro La Revolución Española e Iberoamericana sobre los informes ultra secretos
de las actividades del KGB que fue el decano y maestro emérito de todos los
enanos del circo (servicios secretos) de todos los países y una muestra de lo
que nunca deben hacer los servicios secretos de los Estados:
Implantar un estado de
terror psicológico para
a)
Aterrorizar y controlar a los periodistas y ciudadanos,
b)
Aterrorizar y controlar a profesores de
ciencias sociales y políticas
c)
Controlar a los partidos políticos y responsables políticos
d)
Controlar a las autoridades de los Estados para que no protejan el desarrollo
de nuevas ideas políticas y continúen en
el eterno círculo vicioso de derechas, izquierdas y nacionalismos, ideas
propias de las guerras frías, época dorada de los servicios secretos que ahora
continúan ofreciéndonos ejemplos de su manual
de operaciones encubiertas.
e)
Objetivo crear un estado de terror muy parecido al de cualquier mafia: que la
sociedad civil y todos los ciudadanos no descubran el secreto mejor guardado de
los servicios secretos de todos los estados: su transformación en el mayor
poder mafioso en el seno de cada estado.
Fueron clases magistrales
impartidas por el temible KGB presididas por el temor que provocaban las
condenas a los Golags siberianos o a los más de 300 psiquiátricos repartidos por la ciudad
de Moscú.
Por qué exponemos ahora las
atrocidades del temible KGB. Por una sencilla razón, los agentes del KGB fueron
los “maestros eméritos” de todos los servicios secretos del mundo que
siguieron y siguen sus técnicas al pie de la letra, las ponen a punto y las aplican en sus
respectivas sociedades para perpetrar
las mismas atrocidades que hicieron los agentes del KGB en la URSS.
“Todas
estas reflexiones tienen su origen en informes muy secretos de universidades
soviéticas advirtiendo sobre las actividades del KGB cuando nada se le
escapaba o quedaba fuera de su
actividad. Partiendo de ese poder omnímodo, los agentes del KGB crearon grupos
cuyos objetivos eran encontrar proyectos comerciales, fuesen del tipo que
fuesen, para comercializarlos en todas las sedes que tenían en el exterior transformadas en centros de comercialización y venta de productos así "adquiridos".
Ellos lo dominaban todo ¿Quién se podía oponer?”
“Estaban, están y continúan estando
infiltrados en la sociedad, universidades, centros de investigación, sociedades
científicas (en todos los países), para
enterarse de todo lo que pasaba y pasa por estas instituciones y pudiera
representar una ganancia para ellos y sus empresas”. Saben que las empresas más
punteras han nacido en las Universidades y en los centros de investigación.
“Así,
un proyecto robado por estos “guardianes del Estado”, era modificado por los
mismos funcionarios expertos de la misma administración y no tenían nada más
que modificarlos y traducirlos a los idiomas donde se comercializaría, es
decir, en el mundo entero, en sus propias sedes o delegaciones transformadas en
plataformas de comercialización de productos así “adquiridos””.
Esta es
la razón por la que han impuesto el imperio del terror para que nadie se
acerque al negocio mejor guardado de los servicios secretos: el imperio
económico creado saqueando a las sociedades civiles de todo el mundo.
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